Alberto Constante, (coord.), Arte en la redes sociales, Editorial Estudio Paraíso/Facultad de Filosofía y Letras, UNAM, México, 2013. 166 páginas.
Las redes sociales electrónicas surgieron gracias a los avances tecnológicos y cambiaron nuestra forma de acercarnos al mundo y entre nosotros. Ahora nuestra manera de consumir noticias e imágenes está pensada en gran medida para los formatos y capacidades de estos medios, lo cual nos lleva a cuestionarnos si el arte es una de nuestras expresiones más importantes ¿cómo se ha visto impactada por estas nuevas plataformas?
Explorar esta duda es el propósito de Arte en redes sociales. Texto integrado por nueve ensayos, en el que autores como Alberto Chimal, Paola Uribe, María García Holley, entre otros, reflexionan sobre nuestra forma de relacionarnos con las distintas obras de arte y de cómo ahora estas se van determinando por los medios influyentes en la nueva generación de consumidores de arte.
Cada ensayo y cada autor aborda un fenómeno digital distinto, por ejemplo, Alberto Chimal que analiza y reflexiona sobre la literatura en los tiempos de los 140 caracteres de Twitter o Elva Peniche, quien escribe acerca de la plataforma Flickr y en modo en que esta se ha convertido en una galería fotográfica mundial.
Pero estos ensayos no se quedan en la simple revisión o definición de una plataforma, en realidad el tema es un pretexto para comprender que sin importar el medio, nosotros siempre encontramos nuevas maneras para expresarnos, resignificar la realidad física y la digital experimentando con los lenguajes, símbolos y propiedades de estas, ya sea creando sitios turísticos ficticios a partir de falsear direcciones en un servicio de mapas o permitir a los creadores ganar dinero y presentar sus obras de manera más autónoma, incluso sacar el arte de los recintos y acercarlo a nuevos públicos.
¿Estos cambios son buenos o malos? Al igual que con otros medios, las plataformas son neutras, somos los usuarios los que vamos definiendo sus usos y posibilidades, no son pocas las ocasiones en las que una creación es resignificada de maneras inesperadas para quien la concibió y el terreno digital no es la excepción.
Este texto, editado de manera conjunta por Estudio Paraíso y la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM nos ofrece una necesaria reflexión sobre la tecnología y nuestros hábitos de consumo y creación. Aunque las páginas y aplicaciones mencionadas dejen de ser utilizadas en los años venideros, los cambios en la comunicación se conservarán, lo que le da a este texto un valor histórico, sin olvidar que muestra a los que utilizamos día a día estas herramientas una gran cantidad de posibilidades para expresarnos y seguir creando. Después de todo ¿no se trata de eso?