Corpus – Pliegues – Reflejos

Cora Díaz, “Reflejos 08”, (2010)

Resumen

Expresa la relación entre la producción de una obra visual, realizadas con técnicas de dibujo, pintura y grabado por Cora Díaz, y lo escrito por Jean-Luc Nancy: “Corpus Cora”, “Plier les fleurs” y “Le reflet en soi de l’image”. Serie “Corpus”, dibujo con carboncillo, difuminando las líneas con los dedos, agregando luego, materiales en collage, emulando las cicatrices y tatuajes que la piel toma de su derredor. Serie “Hojas y Pliegues”, pinturas al óleo inspiradas en la naturaleza en tanto paisaje universal, compuesto por jardines, de ellos, tomé la orquídea y trabajé sus colores y estructuras en pliegues que dinamizan rompiendo la continuidad. Serie “Reflejos”, pintura y dibujo, allí trabajo el reflejo como el sujeto de la obra.

Palabras claves: corpus, pliegue, reflejo, soporte, epidermis, orquídea

 

Abstract

It expresses the relationship between the production of a visual work, made with drawing, painting and engraving techniques by Cora Díaz, and what was written by Jean-Luc Nancy: “Corpus Cora”, “Plier les fleurs” and “Le reflet en soi de l’image”. “Corpus” series, I draw with charcoal, blurring the lines with my fingers, then adding collage materials, emulating the scars and tattoos that the skin takes from its surroundings. “Hojas y pliegues” series, oil paintings inspired by nature as a universal landscape, made up of gardens, from which I took the orchid and worked on its colors and structures in folds that dynamize breaking continuity. “Reflejos” series, painting and drawing, there, I work the reflection as the subject of the work.

Keywords: corpus, fold, reflection, support, epidermis, orchid

 

“Que fait-elle au corpus Cora? Elle le prend contre elle, elle le presse, elle l’enlace et le tien serré contre elle, amoureusement. Elle est venue derrière lui et elle lá pris dans ses bras, elle suit de ses doigts ses lignes, sa délinéation. Elle le déligne, le désigne et le dessine.”

Corpus Cora, Jean-Luc Nancy.

 

Es así como Jean-Luc comienza a escribir Corpus Cora, un artículo en el que relata el proceso creativo de la serie Corpus de mi autoría, compuesta de 14 dibujos en formatos de 80 x 80 cm y 90 x 75 cm, con técnica mixta, además de litografías y lino grabados.

 

Elegí el papel como soporte por su procedencia natural. A partir de puntos prolongamos las líneas con carboncillo, estas líneas fueron difuminadas directamente con el sentir táctil de mis dedos. Di formas a los diversos planos y los claro-oscuros de la graduación de grises, mostraban la profundidad en las dos dimensiones del papel. El soporte fue impregnándose de la negrura del carbón en una suerte de catástrofe. De esa relación tinte – papel, se fueron delimitando los espacios para generar una imagen corporal humana que, en su superficie, en su epidermis, evidenciaba las huellas de haber sido en veces dibujada o tallada, en otras acariciada, en otras rasgada.

 

El contacto directo de los dedos de mis manos con el material de dibujo (carboncillo, lápiz, tinta china, pigmentos) sobre el papel, es de plena de emoción. El ardor en la yema de los dedos provocado por el continuo frotado sobre el papel, es levemente perceptible, sin embargo, el desarrollo de la piel y sus anexos en ese nuevo cuerpo o imagen de cuerpo debía continuar.

 

La epidermis se expone directamente al ambiente, al medio que lo rodea, a los observadores que lo miran, lo ansían, lo tocan, lo hieren, dejando huellas, cicatrices imborrables, impregnando su marca deseada o no deseada sobre su piel, marcas indelebles que solo siente el cuerpo en su superficie y lo profundiza en grados, dependiendo de las circunstancias. La piel recibe ese collage de estructuras ajenas, que irán con el transcurrir del tiempo adhiriéndose más y más a sus carnes.

 

No todo es drama y violencia en el proceso creativo, en realidad crear, es una mezcla de ternura y dureza, en sus diferentes matices. Solo el creador podrá sentirlos, solo alguien sensible podrá observarlo e interpretarlo y solo el nuevo cuerpo podrá portarlo en toda su existencia, mostrando y dando un testimonio de si mismo.

 

Cada corpus es diferente, cada quien tiene su propia estructura y su propia personalidad, su propia trayectoria que ojalá lo llevara a relatar y compartir su propia existencia.

 

La piel es el órgano más grande del cuerpo, es la frontera entre el contenido interior orgánico del cuerpo y el exterior que lo rodea, sin embargo, en esa línea fronteriza se encuentran los mayores intercambios, las mayores contribuciones bilaterales, los elementos más profundamente compartidos, es una zona de influencias en ambas direcciones en las que sus adecuaciones se han ido dando con el transcurrir del tiempo y esa temporalidad, es la que hará que estas inicialmente extrañas contribuciones sea interiorizadas hasta ser tomadas como propias.

 

El uso de la piedra en el caso de la litografía, del metal en la punta seca, o el tallado del linóleo en el linograbado, o las agujas en el caso de la costura, han sido instrumentos ajenos a mi persona, que además de ser manipulados a voluntad, han contribuido con sus propias estructuras y efectos a dar al proceso de impresión y a la imagen, características especiales inherentes a su origen.

 

Corpus Cora, las palabras finales de Jean-Luc Nancy son: Elle pense, Cora, corps à corps, elle grave cette pensée que le corpus nous étreint tous, qu’il nous résorbe en lui cependant qu’elle s’y perd en y perdant ses mains, ses crayons, ses fusains, ses stylets, ses plumes et ses ongles, toutes ses paumes pâmées dans la peau amoureuse qui le fait défaillir”.

 

“Plier les fleurs”

 

Es el título del ensayo que Jean-Luc Nancy escribe en el 2006, para un catálogo de pinturas al óleo de la serie “Hojas y pliegues” de mi autoría, que constan a la fecha de 80 pinturas de diferente formato.

 

[…] Pliée, la fleur fleurit d’une autre efflorescence.

La pliure introduit dans la peinture un acte de dessin supplémentaire, un tracé excédent qui ne recouvre pas le premier, mais qui l’amplifie au contraire et le pousse, pour ainsi dire, dans ses derniers retranchements […]

 

La obra de un artista debe ser necesariamente la expresión de su naturaleza personal, una interacción de su pensamiento, su sentir, su técnica con sus materiales de trabajo objetivos o subjetivos. En esta serie, que aún continuo, tomo como fuente de inspiración la naturaleza organizada como un macrocosmos: un gran paisaje que es el resultado de la unión de múltiples jardines tanto territoriales como personales, de ese jardín personal, he tomado una flor cuya imagen, dibujo y pinto con una estructura de pliegues.

 

Si analizamos detenidamente la naturaleza, ella esta compuesta de un conjunto ordenado de líneas y planos que se pliegan entre si y sobre si, en un ir y venir dinámico y continuo. Plegar y desplegar o replegar, como yo un ser humano, que en todo lugar donde uno se establece, deberá plegarse o desplegarse ante la sociedad, ante sus leyes, sus hábitos y costumbres; plegarse ante la vida, ante la soledad; plegados continuos que te dejan huellas profundas, líneas tan marcadas y confusas, que nadie que no tenga la capacidad de sentir lo que yo siento lo podrá comprender.

 

Escoger una flor entre tantas especies pudiera ser una dificultad mayor, sin embargo, encontré una, especialmente bella, la orquídea, crece en mi territorio real e imaginario, se establece en un clima cálido y húmedo como en el que yo nací y crecí, es atractiva como todos intentamos ser y a pesar de todo, no tiene una tierra o un lugar en donde afirmar sus raíces, ellas se estableces sobre otros vegetales, reconociéndose extranjera al lugar, no hace daño a su hospedero, vive de la humedad que él despide y no utiliza. Contribuye con su sombra, su belleza, y lo que es mas, atrae a insectos voladores (las abejas entre ellas), que contribuyen a la polinización, reproducción y sobrevivencia de esas especies. Es un migrante grandemente contributivo como muchos de nosotros, llevamos nuestra alma, nuestra cultura, las vivencias que nos han formado para contribuir a donde llegamos, aunque siempre seamos considerados aun extranjeros. La universalidad del conocimiento, no nos ha dado aún la pertenencia al lugar donde nos establecemos.

 

He trabajado los pétalos con sus delicados ocres, granates, verdes, amarillos, morados, y con la gama de progresión de esos colores que van de sus claros a sus oscuros y viceversa, dando de esa manera el volumen que cada uno de ellos requiere; muestran su esplendor en unas dinámicas y múltiples eclosiones, como remolinos que con fuerza provienen del interior y se esparcen en todas direcciones. Cada elemento llega a su línea de flexión, a un pliegue visual que quiebra su continuidad y lo conduce hacia un espacio de aparente oscuridad donde esconde sus secretos que sólo el buen observador podrá descubrir. De ese lugar escondido reaparece con nueva fuerza y en direcciones y con intenciones diferentes. Tarde o temprano en su trayectoria el elemento pictórico se pliega, al nacer, o en su trayecto, o al final de su camino, cuando en apariencia, llega a un nuevo renacer.

 

La orquídea en la pintura, esta presente en su ausencia cuando es re-presentada, y exige sin embargo llamarse como tal, aunque en la realidad de la imagen representada, no sea ella o tal vez si.

 

No hay mejor manera de terminar esta parte, que con la transcripción de lo escrito por Jean- Luc Nancy, al finalizar el capítulo 4 al que tituló: “Orchidiaz”.

 

“Mais sa provenance ne se trouve ni dans le pinceau, ni dans la toile, ni dans la main ou dans la tête de la femme qui peint. C’est plutôt cette femme qui provient elle-même d’ailleurs, d’un bulbe obscur enfoui sous le sol qui la porte, elle-même avec  la toile et le pinceau, d’un bulbe immatériel et translucide qui pourtant n’est rien d’autre que son propre corps, sa propre peau doucement pressée sur la toile. Cette poussée rend la toile invisible tout en faisant surgir de son néant rêche les taches, les traînées, les affleurements des pourpres, des bronzes ou des safrans qu’elle lâche en gouttes et en lames en même temps qu’elle replie sur eux l’air que ses gestes ont pour un instant remué. Elle plie et replie sur eux-mêmes les pétales, les feuilles et les tiges de son propre secret, de sa chair, de son âme ainsi largement dépliée : ouverte, avouée, avérée sous son vrai nom d’Orchidiaz.”

 

“Le reflet en soi de l’image”

 

En julio 2011 Jean-Luc Nancy, escribe “Le reflet en soi de l’image”, para el catálogo de la exposición de la serie “Reflejos” de mi autoría. Aquí un párrafo:

 

Cora Díaz extrapole plutôt à partir de ces phénomènes saisis selon leur perception ordinaire: elle saisit dans le reflet ce qui s’écarte de la reproduction à la quelle on pense lorsqu’on l’évoque. De manière générale, le reflet n’est pas la reproduction (symétrique, inversée, renversée) d’une vue mais il est d’abord la production de cette vue elle-même en tant qu’elle se rapporte à soi.

 

Efectivamente, en esta serie de pinturas al óleo y dibujos de formato variado, abordo la imagen del reflejo como el sujeto de trabajo. A partir de la naturaleza, represento los árboles, nenufares y flores en su relación con las superficies reflejantes como el agua, en el que su transparencia permite observar la continuidad visual de un elemento que de otra manera, pudiera talvez ser solo imaginable para existir. Lo oscuro de la profundidad y el ángulo de la fuente de la luz, permite  dar la calidad reflejante a esa superficie, sobre la cual he trabajado el reflejo, en la parte del elemento que será reflejado.

 

Reflejo proviene del latín “reflexus”, palabra compuesta de “re”: regresar y “flexus”: flexionar, doblar o cambiar de dirección. En vocablo o en lenguaje visual, nos promueve a parar un instante y mirar atrás lo que se ha recorrido o realizado, luego decidir el cambiar de dirección, regresar o continuar haciendo camino. Ese cambio de dirección de la luz, nos permite observar el reflejo y trabajar la evidencia del elemento reflejado.

 

Estas obras son un alto en el recorrido, una mirada hacia atrás, hacia las fuentes de vida, desde el punto donde nos encontremos, desde la profundidad de nuestro ser, es cerrar y luego abrir los ojos para encontrarnos con una nueva visión. Es buscar en el recuerdo, una imagen que está ya ausente en la temporalidad que sucedió y, bajo esa condición de ausencia se hace evidente su presencia en el lienzo y, esta imagen está presentada primero y representada luego en su reflejo, presencia y re – presencia que también son sólo aparentes.

 

Del infinito de la profundidad, las imágenes van saliendo hacia la luz como si ellas hubieran estado refugiándose en ellas, emergen de la oscuridad haciéndose mas visibles en la medida que la luz los va evidenciando. La claridad de la luz será mas evidente cuanto mas negra sea la oscuridad. Entre la luz y la oscuridad, existe una interdependencia en sus presencias y ausencias complementarias.

 

La abundancia del agua en tanto imagen en esta serie es remarcable, y esta característica natural nos permite emularla en la pintura; La trasparencia que es el resultado del juego de las luces-color sobre un elemento que permita ser visible bajo la transparencia del agua. El agua como superficie para el reflejo y finalmente un fenómeno que felizmente se da en la naturaleza y que presentamos en la pintura: la continuidad del fenómeno agua: reflejar en el como sujeto en el rio original, para que a partir de allí se traslade este mensaje de generoso reflejo hacia las nubes que serán llevadas a distancias poco imaginables con la fuerza de los vientos, compartiendo por medio de las gotas de lluvia que caerán en tierras que esperan el agua para desarrollar su fertilidad. Ciclo del agua maravilloso que asegura la supervivencia de las especies. Cuidemos pues esa natura que nos cobija y que será la herencia mas apreciada que legaremos a otros seres vivientes del presente y futuro.

 

Bibliografía

  1. Nancy, Jean-Luc, Corpus, Métailié. France 1992.
  2. ______________, Le Regard du portrait. Édition Galilée. France 2000
  3. ______________, Plier les fleurs. Catálogo Hojas y Pliegues – Cora Díaz. Editorial Montemorelos. México 2006
  4. ______________, Corpus Cora. Catálogo Corpus Cora – Cora Diaz. Editorial Montemorelos. México 2008
  5. ______________, Le Reflet en soi de l’image. Catálogo Reflejos – Cora Díaz. Editorial Universitaria, Universidad Autónoma de Nuevo León, México 2012

Leave a Reply