Bipolítica, pandemia y cuidado
No han sido pocos los esfuerzos que desde la filosofía se han hecho para pensar el acontecimiento de la pandemia. Desde los primeros y polémicos textos de autores como Agamben y Žižek, hasta notables compilaciones como Pandemia, Globalización, Economía —materializada en España de la mano de Teresa Oñate—, Filosofía de lo imprevisible. Reflexiones para la pandemia —editada en México con Alberto Constante a la cabeza—, o el proyecto multilingüe Pensar la pandemia. Philosophize with face mask —encabezado por Arturo Aguirre—, pasando por una cantidad verdaderamente apabullante de artículos de opinión publicados en diferentes lugares del mundo, la filosofía en sus diferentes vertientes se ha hecho presente para señalar, visibilizar y criticar diferentes aristas de la problemática situación.
Tras casi un año de emergencia sanitaria, y con un horizonte poco esperanzador frente a nosotros, la producción de textos filosóficos en torno al acontecimiento parece haber disminuido. Por ello, parece necesario redoblar esfuerzos para seguir pensando nuestra actualidad, acaso ya no tan de prisa, y quizá dejando de lado el fatalismo y los determinismos un tanto catastrofistas que ciertas lecturas de la biopolítica nos han dejado, pues —ahora lo sabemos— el fenómeno que tenemos frente a nosotros no es más una contingencia, una emergencia, sino una situación que ha estado con nosotros desde hace mucho tiempo, y que no se desvanecerá del todo en el futuro próximo. No habrá ningún regreso a ninguna normalidad, toda vez que ella, desde tiempo atrás, ha estado recubierta por los flujos que hoy se maximizan con la presencia del virus.
Con esta convicción, en el Grupo de Investigación Transversal sobre Biopolítica y Necropolítica, conformado por estudiantes y profesores de la UACM, la UNAM y la UAM, nos hemos dado a la tarea de pensar la actualidad, no ya desde la catástrofe, sino desde el cuidado, desde un hacernos cargo de una situación que ha venido fraguándose desde hace largo tiempo, y que el Sars-CoV-2 ha evidenciado irreversiblemente. Por ello, con diferentes diagnósticos biopolíticos de fondo, hemos emprendido en el segundo semestre del año que recién terminó, una investigación orientada hacia el cuidado, de sí y de nosotros, de los otros, de todos. El objetivo es construir salidas, trazar fugas, dibujar estrategias de resistencia en los intersticios y en las grietas de los poderes que se ejercen de cotidiano. Cada quién desde sus líneas de investigación, pero colocados en el cruce de lo biopolítico y la pandemia, los textos aquí compilados abren la posibilidad de la crítica desde horizontes como la imagen, la estética, la política, la enseñanza, la universidad, el psicoanálisis, el delirio, la salud mental y la filosofía misma, no para hacer proyecciones a futuro ni para regodearse en predicciones cumplidas, sino para hablar desde la experiencia, con ella, para ella. Quienes aquí escriben parten de la convicción de que siempre hay otros mundos posibles a inventarse y habitarse.
Bily López
Magdalena Contreras, enero de 2021.